El Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas tiene decidido sacar adelante las medidas previstas en el programa electoral del PP para rebajar la factura fiscal de las pymes en el impuesto sobre sociedades. A pesar de la subida del IRPF y del IBI aprobada en diciembre, el Ejecutivo mantiene la idea que rebajar los impuestos a autónomos y pequeñas empresas para reactivar la economía. Y se hará a lo largo de este trimestre.
Las medidas que contempla el Ejecutivo pasan por engrosar el número de empresas que pueden acogerse al régimen fiscal para pymes y elevar el tramo de beneficios que tributa a tipos menores. Además, Montoro aseguró que se establecerán medidas fiscales para facilitar el acceso al crédito de las pymes, que conforman más del 90% del tejido empresarial español.
El Ejecutivo valora incluir en próximos Consejos de Ministros un cambio legislativo que eleve de 300.000 euros a 500.000 euros el tramo del impuesto sobre sociedades que tributa al 25%. A partir de ese umbral, se aplicará el gravamen del 30%. Ello puede suponer un ahorro fiscal de hasta 10.00 euros por compañía. Sin embargo, esta medida solo será útil para sociedades que tienen beneficios. Actualmente, casi el 70% de las pequeñas y medianas empresas presentan bases imponibles negativas.
Por otra parte, el número de pymes se incrementará ya que Hacienda aumentará de diez a doce millones el umbral de la cifra de negocio para tener la consideración de pequeña y mediana empresa y, por tanto, beneficiarse de los regímenes especiales para este tipo de compañías. El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero ya elevó este límite de los ocho a los diez millones en 2011.
Otra de las medidas del anterior Gobierno, como la rebaja del tipo en Sociedades hasta el 20% para las empresas con una cifra de negocio inferior a cinco millones, ya se prorrogó en el real decreto-ley de medidas urgentes en materia presupuestaria que aprobó el Consejo de Ministros el 30 diciembre.
De momento, las pequeñas empresas -junto con los compradores de vivienda- son los únicos colectivos que contarán con rebajas impositivas durante este ejercicio. El titular de Hacienda, Cristóbal Montoro defendió ayer en la Cadena COPE la subida del IRPF para dar respuesta a "una situación extraordinaria". Y reiteró que las rentas más bajas no se verán afectadas. El ministro de Hacienda aseguró que el Ejecutivo "no tiene intención de subir el IVA", una medida que la Comisión Europea y organismos internacionales como el FMI, han recomendado adoptar para rebajar el elevado déficit fiscal, que alcanza el 8%. Rajoy también señaló en el debate de investidura que no tenía intención de elevar los impuestos y, finalmente, el Gobierno aprobó el mayor aumento de la historia en el IRPF. En cualquier caso, Montoro aseguró que al final de la legislatura, los contribuyentes pagarán menos impuestos que con el anterior Gobierno.
El presidente del Gobierno, que el lunes dará su primera rueda de prensa tras reunirse con el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, también prometió en el Congreso una ayuda de 3.000 euros para aquellas empresas que contraten a su primer trabajador. Por otra parte, el equipo de Hacienda estudia la fórmula para articular un importante cambio en el IVA que supondrá que las pymes puedan pagar el tributo cuando cobren las factura y no, como sucede ahora, en el momento de emitirlas.
Más control sobre las comunidades
Más allá de las rebajas fiscales para pymes, el principal objetivo del Gobierno pasa por recortar el elevado déficit fiscal que, según datos provisionales, superó en dos puntos de PIB -unos 20.000 millones de euros- el objetivo comprometido con Bruselas. Ello implica que el conjunto del sector público deberá realizar un ajuste de unos 40.000 millones de euros.
Las comunidades autónomas son las principales culpables de la desviación del déficit. Montoro se reunirá esta semana con las regiones gobernadas por el PP y, la próxima, con Cataluña, Asturias y Canarias para abordar la situación de las finanzas públicas. También está previsto que la próxima semana se celebre un Consejo de Política Fiscal y Financiera, órgano que reúne a los responsables de Hacienda del Ministerio con sus homólogos en las consejerías autonómicas, para debatir nuevas medidas de control presupuestario. El Ejecutivo de Rajoy pretende extremar el control sobre los gobiernos autonómicos y fijar en un ley un límite de deuda pública para las comunidades. Además, aspira a aprobar un regla de gasto que impida desviaciones en el presupuestos como las registradas en los últimos ejercicios. Montoro explicó que el objetivo es fijar en clave interna medidas ya aprobadas en la última cumbre de la UE. De hecho, Hacienda también quiere articular un régimen de sanciones que penalice a las Administraciones que se desvían de lo presupuestado.
Por otra parte, Montoro aseguró que en unos pocos meses podrían desaparecer 450 organismos autónomos, fundaciones y empresas públicas. De hecho, las comunidades ya deberían haber realizado este ajuste. Se comprometieron a ello con el anterior Ejecutivo y no han cumplido el pacto. Así, este tema volverá a abordarse en el Consejo de Política Fiscal de la próxima semana. Montoro descartó medidas como el copago y recordó que el Gobierno del PP ya desechó su introducción. En este sentido, aseguró que el Ejecutivo es partidario de mejorar la gestión de los servicios públicos a través de reformas. Acerca del sistema financiero, el ministro de Hacienda auguró más fusiones.
Las cifras
10.000 euros es la rebaja fiscal máxima que supondrá para las pymes la medida de elevar de 300.000 euros a 500.000 el tramo del impuesto sobre sociedades que tributa al 25%.
12 millones será el umbral máximo de cifra de negocio que permitirá acogerse al régimen especial para pymes. Actualmente, el límite está fijado en diez millones.
8% es el déficit fiscal registrado en 2011, según los datos aún provisionales de Hacienda. Ello supone una desviación de 20.000 millones de euros sobre el objetivo comprometido con Bruselas. La mayor parte de la desviación negativa corresponde a las comunidades autónomas.
Aval para que Madrid baje impuestos si hay margen
Mientras el Gobierno central ha decidido elevar el tipo de gravamen estatal del IRPF, hay algunas comunidades autónomas que piensan en lo contrario. Es el caso de la Comunidad de Madrid. Su consejero de Economía, Percival Manglano, señaló ayer que está en estudio la posibilidad de una rebaja en los tramos del IRPF autonómico. De decidirse finalmente, se aplicaría a las rentas generadas este año, por lo que no tendría efectos hasta 2013, cuando se declare la renta de 2012. "El estudio lo llevamos llevando a cabo desde hace tiempo, por lo que yo desvincularía esta decisión de cualquier otra aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy", dijo. Manglano añadió que no ve en ello "ningún tipo de contradicción con la Hacienda central sino al revés: los ciudadanos se podrán beneficiar de decisiones que sean fruto de la buena política presupuestaria, fiscal y económica que se ha llevado a cabo en la comunidad".
Cospedal
La secretaria general del PP y presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, abundó en ello también. Insistió en que la idea del Gobierno madrileño de Esperanza Aguirre se encuentra, por ahora, en fase de análisis, añadiendo que, en todo, será decisión del Gobierno autonómico siempre que cumpla con el objetivo de déficit fiscal. "La Comunidad de Madrid sabrá si cumple", dijo.
Pocas comunidades están en disposición de bajar el gravamen autonómico del IRPF, en un impuesto del que se quedan el 50% de lo que se recauda. La semana pasada, la Generalitat Valenciana aprobó, de hecho, una subida del IRPF para aquellos que deducen por compra habitual al limitar este beneficio en el tramo autonómico.